¿Es necesario tener un seguro como lashista?

¿Qué es el seguro de extensiones de pestañas?

El seguro de extensión de pestañas es un tipo de seguro de responsabilidad civil empresarial diseñado específicamente para los profesionales de la belleza que prestan servicios de extensión de pestañas. Cubre cualquier reclamación presentada contra usted o su empresa si algo sale mal durante la aplicación de extensiones de pestañas. Este tipo de póliza puede utilizarse para protegerle de negligencias profesionales, daños a la propiedad, responsabilidad por productos defectuosos y otros riesgos asociados a la gestión de un negocio de pestañas.

La póliza también cubrirá los gastos legales en que incurra para defenderse de una reclamación en caso de que surja. Esta cobertura puede ser especialmente importante si un cliente o un tercero le demanda por daños derivados de sus servicios como Lashista. Es importante tener en cuenta que la mayoría de las pólizas sólo cubren las reclamaciones efectuadas después de la fecha de compra, por lo que hay que asegurarse de adquirir la póliza antes de ofrecer cualquier servicio de pestañas. Para tener derecho a un seguro de extensiones de pestañas, su compañía de seguros le pedirá una prueba de su diploma de una escuela de pestañas.

¿Qué cubre el seguro para lashistas?

Seguro para técnicos de extensiones de pestañas Lashistas

La mayoría de las pólizas ofrecen dos tipos de cobertura: seguro de responsabilidad civil y seguro de responsabilidad civil por productos defectuosos.

Seguro de responsabilidad civil

Cubre cualquier reclamación derivada de lesiones o daños materiales causados por su trabajo como técnico de pestañas, desde quemaduras provocadas por el adhesivo hasta reacciones alérgicas experimentadas por los clientes debido a los productos utilizados durante el tratamiento.

Seguro de responsabilidad civil por productos defectuosos

Cubre cualquier lesión o enfermedad sufrida a causa de productos defectuosos suministrados por usted (como pestañas), que podrían dar lugar a costosas facturas médicas o demandas judiciales contra usted o su empresa.

Vale la pena señalar que algunas pólizas pueden ofrecer también coberturas adicionales, como la indemnización profesional (que cubre las pérdidas relacionadas con el asesoramiento prestado), los daños materiales (por ejemplo, si se daña el equipo durante el tratamiento) y la responsabilidad civil general (que cubre las negligencias no profesionales). Lo mejor es leer detenidamente las condiciones antes de contratar cualquier tipo de póliza, para saber exactamente qué tipo de protección obtiene por su dinero.

¿Necesito un seguro como Lashista?

Al poner en marcha su negocio de extensiones de pestañas, el seguro no es lo primero en lo que piensa, pero es una consideración legal importante. Sí, es muy recomendable que todos los técnicos de pestañas tengan algún tipo de seguro para protegerse económicamente en caso de que algo vaya mal mientras prestan sus servicios. La indemnización profesional y la responsabilidad civil/de producto son componentes esenciales que deben incluirse en cualquier póliza global. Sin embargo, también puede ser necesaria una cobertura adicional en función del lugar en el que trabaje (por ejemplo, daños materiales si trabaja en un salón de belleza). Haciendo extensiones de pestañas, puedes ganar mucho dinero bastante rápido, y sería una pena que todo tu negocio se viniera abajo por falta de seguro, así que asegúrate de que estás debidamente asegurada.

También es importante recordar que la mayoría de las aseguradoras exigen pruebas de cualificación/formación antes de emitir la cobertura. Por lo tanto, asegúrese de que todos los documentos pertinentes están al día antes de solicitar un presupuesto en línea o ponerse en contacto directamente con posibles proveedores.

Seguro como Lashista

¿Cuánto cuesta el seguro para lashistas?

El coste del seguro de técnico de Lashista variará en función del tipo de cobertura que elija, la cantidad de cobertura que necesite y el nivel de riesgo asociado a su negocio. Por lo general, las pólizas empiezan a partir de unos 100 euros al año para una cobertura básica de responsabilidad civil/de producto. Sin embargo, las coberturas adicionales, como la indemnización profesional o los daños materiales, pueden aumentar considerablemente esta cifra.

También hay que tener en cuenta que algunas aseguradoras pueden ofrecer descuentos por compras mayores (por ejemplo, paquetes de seguros para salones de belleza) o premios de fidelidad (por ejemplo, si renueva su póliza cada año). Siempre es mejor comparar presupuestos de distintos proveedores para obtener la cobertura más completa al precio más bajo posible. Ten en cuenta que también tendrás que ponerte en contacto con tu compañía de seguros si quieres lanzar tu propia línea de extensiones de pestañas, para ajustar tu contrato.